Sexo con su madre después del yoga

En casa de esta familia hay una pequeña tradición: quien practica yoga con la madre tiene una recompensa por haber hecho el esfuerzo de ponerse en forma. La recompensa es un tratamiento sexual de primera mano, algo que a la madre le encanta dar, porque así sigue haciendo ejercicio. Esta vez quien lo ha hecho es el hijo, que espera sentado a que su madre le haga una mamada. Pero después de chupar un poco la mami dice que quiere polla, así que se da la vuelta, clava el rabo dentro de su coño y se mueve un rato hasta que su hijo no aguanta más por el sexo con su madre.