Polvazo a cuatro patas con la rubia culona del gimnasio

Como todos los días, este tío acude al gimnasio para levantar un rato las pesas, aquí se encuentra con esta rubia culona que tiene un trasero de infarto. La zorra sabe que lo pone muy caliente por eso cada vez que hace algún ejercicio, menea su culo de una manera brutal. Con tanto movimiento, la guarra también se pone calentorra y se coloca de rodillas para chuparle la polla a este tío. Después, la muy zorra se pone en posición de perrito para que su compañero le reviente el coño a base de buenos pollazos. Las embestidas son tremendas y acaba con el trasero lleno de semen.